Beneficios del Ácido Alfa Lipoico (ALA)

Santiago, agosto de 2025 – El Ácido Alfa Lipoico (ALA) ha despertado creciente interés en el mundo médico y científico por sus múltiples beneficios en la salud metabólica, neurológica y celular.

Presente de forma natural en pequeñas cantidades en alimentos como la espinaca, el brócoli o la carne roja, y también producido por el cuerpo humano, el ALA cumple una función clave como antioxidante universal.

Según estudios recientes, este compuesto no solo neutraliza los radicales libres que dañan las células, sino que también regenera otros antioxidantes esenciales como las vitaminas C, E y el glutatión, fortaleciendo las defensas internas del organismo frente al envejecimiento y enfermedades crónicas.

Impacto en la salud metabólica y neurológica

Uno de sus aportes más destacados es su capacidad para mejorar la sensibilidad a la insulina, lo que lo convierte en un aliado importante en el tratamiento de la diabetes tipo 2 y el síndrome metabólico.

Además, ha mostrado efectos prometedores en el control de la neuropatía diabética, migrañas y otros trastornos neurológicos, gracias a sus propiedades neuroprotectoras.

Uso en salud hepática y energética

En el ámbito hepático, el ALA está siendo evaluado como parte del tratamiento para la enfermedad del hígado graso no alcohólico (MASLD), mostrando mejoras en la función hepática y la composición corporal.

También se ha observado que participa en la producción de energía a nivel celular, lo que puede ayudar a reducir la fatiga en personas con alta demanda energética.

Dosis recomendada

La dosis recomendada oscila entre 300 y 600 mg diarios, siendo esta última considerada segura para adultos sanos. Para una mejor absorción, se aconseja ingerirlo con el estómago vacío.

Precauciones

• Diabetes: Puede potenciar el efecto de medicamentos hipoglucemiantes. Controlar niveles de glucosa.
• Hipotiroidismo: Podría disminuir levemente los niveles de hormonas tiroideas.
• Déficit de tiamina: Precaución en personas con alcoholismo crónico.
• Embarazo y lactancia: Su uso debe ser supervisado por un profesional de la salud.

Estudios recientes (2024–2025)

• Neuroprotección en cirugía: Mejora la función cognitiva y reduce el daño oxidativo.
• Migrañas: Reduce su frecuencia y es bien tolerado.
• Hígado graso (MASLD): Mejora la salud hepática y la composición corporal.
• Presión arterial: 600 mg/día reduce presión sistólica y diastólica.

Comparación con otros antioxidantes

• Coenzima Q10: Más enfocada en salud cardiovascular y energía celular.
• Glutatión: El ALA ayuda a regenerarlo y potenciar su acción.
• Resveratrol: Enfocado en longevidad, complementa al ALA.
• Vitaminas C y E: El ALA potencia sus efectos antioxidantes.

Fuente: PubMed:https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov

PMC:https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/ Frontiers: https://www.frontiersin.org ClinicalTrials.gov: https://www.clinicaltrials.gov

MDPIAntioxidants:
https://www.mdpi.com/journal/antioxidants